Publicada el 04 de marzo 2020.

Chile a nivel internacional y en materia ambiental ha abordado firmemente los desafíos globales para lograr un desarrollo sustentable durante la presente década, estimulando la responsabilidad social de las empresas a través de diversos convenios y acuerdos internacionales. El Decreto Supremo No. 685 publicado el 13 de octubre de 1992, ratifica el Convenio de Basilea que regula el control de los movimientos transfronterizos de los desechos peligrosos y su eliminación. Su objetivo es proteger el medio ambiente y la salud humana contra los efectos nocivos derivados de la generación de residuos, el manejo inadecuado de los mismos, los movimientos transfronterizos y la eliminación de residuos peligrosos.

Dicho Convenio, actualmente cuenta con 170 países miembros quienes aplican el procedimiento del “consentimiento fundamentado previo”, estableciendo que los envíos efectuados sin consentimiento son ilícitos, lo mismo el envío efectuado a un Estado y desde un Estado que no sea parte del convenio. Los movimientos transfronterizos de residuos peligrosos y no peligrosos, deben permitirse sólo cuando el transporte y la eliminación final de tales residuos sean ambientalmente racionales, mediante un estricto control de la salud humana y el medioambiente contra los efectos nocivos que pueden derivarse de la generación y el manejo de este tipo de residuos.

Puedes revisar la fuente de este artículo en PROMULGA EL “CONVENIO DE BASILEA SOBRE EL CONTROL DE LOS MOVIMIENTOS TRANSFRONTERIZOS DE LOS DESECHOS PELIGROSOS Y SU ELIMINACION”