Sin duda alguna los equipos electrónicos son un gran aporte a nuestro quehacer diario, ya que nos simplifican la vida de numerosas maneras. Sin embargo, una vez finalizado su ciclo de vida, estos tienden a acumularse como desechos electrónicos o E-waste que, de no ser eliminados correctamente, se convierten en parte del problema de la gran acumulación electrónica en todo el mundo.
De hecho, un reciente informe de la ONU señala que cada año se producen alrededor de 50 millones de toneladas de residuos electrónicos y eléctricos, de los que solo se recicla correctamente el 20%, transformando el resto en desechos altamente peligrosos que terminan en vertederos, u otros lugares, convirtiéndose en una gran amenaza para el ecosistema.
Con estas cifras en aumento, se estima que para fines del 2021 se habrán producido en el mundo cerca de 57,4 toneladas de estos residuos, ¡el equivalente al peso de la Muralla China! y es tarea de todos aportar para comenzar a revertir esta problemática.
Como parte de la solución, hoy la basura electrónica se está convirtiendo en una gran oportunidad de trabajo para muchas personas. En varias ciudades del mundo están surgiendo centros de reciclaje formales que permiten recuperar materiales como oro, plata, cobre, platino, paladio, entre otros; elementos valorados en 62.500 millones de dólares anuales.
Para aportar a este objetivo, en Chile existen diversas empresas encargadas de acopiar y reciclar toda clase de desechos electrónicos, a quienes las empresas y personas pueden contactar para disponer correctamente los equipos que ya no funcionen, aportando así a la reducción de estas alarmantes cifras.
En Hidronor estamos comprometidos con este tipo de iniciativas ecológicas. ¡Sumemos a la economía circular y promovamos la recuperación de residuos!