El arsénico es un elemento químico que se encuentra de manera natural en la naturaleza, ya sea en minerales o metales, y también se libera en diversos procesos como la erosión o la erupción de volcanes. Además, se produce en la minería como subproducto del concentrado de oro-cobre, cuando estos se refinan para obtener el mineral.
Cuando se acumula en grandes cantidades, puede ser muy peligroso para la salud y el medio ambiente. En este sentido, según la Organización Mundial de la Salud (OMS), el arsénico puede llegar a producir lesiones cutáneas, cánceres de distintos tipos, diabetes, y un efecto negativo en el desarrollo cognitivo de los niños, entre otras enfermedades.
En el caso de Chile, específicamente en la industria minera, este elemento químico se ha convertido en un grave problema, dado que, acorde al último informe del Banco Mundial sobre el nivel de contaminación del agua potable en el mundo, se estableció la presencia de arsénico en 83 localidades de Chile, donde se superaban los niveles establecidos por la OMS.
Por esta razón, el resultado de este informe invita, sin duda, a que las empresas comiencen a neutralizar el arsénico utilizado en minería mediante diferentes técnicas, las que tienen como fin proteger al medio ambiente y la salud de las personas.
¡Tomemos conciencia!