A pesar que muchas industrias no respetan las normativas sobre gestión de residuos peligrosos, estas malas prácticas han disminuido considerablemente. 

En junio de 2024 se cumplirán dos décadas del Decreto Supremo 148 del Ministerio de Salud, que estableció las condiciones sanitarias y de seguridad mínimas para la gestión de residuos peligrosos (Respel), es decir, para su “generación, tenencia, almacenamiento, transporte, tratamiento, reúso, reciclaje, disposición final y otras formas de eliminación”.

Al respecto, Juan Andrés Salamanca, nuestro gerente comercial, plantea que “en la actualidad hay una mayor conciencia por parte de las empresas generadoras sobre la responsabilidad que les compete respecto a este tema”. Sin embargo, también estima que la normativa debe mejorar.

Desafíos del DS 148

Nuestro ejecutivo sostiene que la versión vigente de este decreto no contempla el almacenamiento temporal de residuos entregado como servicio, donde distintos generadores consoliden cargas y sean enviados a sitios de eliminación, “algo muy necesario cuando los puntos de generación están muy distantes de las zonas de eliminación”, asegura.

Salamanca estima que las políticas públicas que se han diseñado últimamente tienden hacia una valorización del residuo como forma de gestión previa antes que la eliminación propiamente tal. “La Ley REP ya promulgada promueve esto, por lo que el DS148 debiera actualizarse justamente en los términos que la Ley REP establece”, añade el ejecutivo.

En Hidronor, si bien somos reconocidos por dar una solución sanitaria y ambiental a los residuos generados por otras empresas, a través del tratamiento y posterior disposición final de éstos, de igual forma hemos desarrollado proyectos de innovación orientados a la fracción valorizable en línea con las políticas lanzadas en los últimos años. 

¡Seguimos aportando a la sostenibilidad ambiental del país!