La globalización ha impulsado el consumo de aparatos eléctricos y electrónicos como celulares, computadores y televisores, entre otros aparatos que poseen una alta tasa de recambio que aumenta con el PIB de las naciones.

Pero luego de cumplir su vida útil o dañarse, estos aparatos son desechados de formas poco adecuadas, impactando en la generación de la denominada chatarra electrónica o RAEE’s (residuos de aparatos eléctricos y electrónicos).

Se estima que en el mundo estos residuos crecen exponencialmente hasta cuatro veces más rápido que otros residuos y cerca del 80% de estos materiales llegan a vertederos no adecuados. De hecho, anualmente en el mundo se generan más de 50 millones de toneladas y se pierden más de 60.000 millones de dólares en estos residuos.

No obstante, a nivel nacional se estima que en Chile se generarán más de 400.000 toneladas anuales de estos residuos a contar de 2028, ubicándonos como uno de los países sudamericanos con mayor tasa de generación anual cercana a los 12 kg/hab.

En Hidronor hemos aportado a subsanar esta situación, convirtiéndonos en facilitadores del proceso de la cadena de valor de la economía circular del país trabajando bajo el concepto “del residuo al recurso”, gracias a lo cual orientamos parte de nuestros esfuerzos en utilizar los desechos industriales que captamos para tratarlos y reintroducirlos a la cadena de producción industrial, como es el caso de residuos [KH1] como pilas, chatarras, piezas metálicas, baterías, entre otros, que valorizamos con este objetivo.