Publicado el 26 de noviembre de 2020.
Como es bien sabido, los desechos tóxicos son responsables de ocasionar múltiples daños a la salud y a la contaminación del medio ambiente (agua, aire, suelo, flora y fauna).
En el rubro industrial, estos residuos provienen en mayor cantidad de actividades como la minería, construcción, producción en línea, entre otras actividades que, por ley en nuestro país, requieren tratamientos in situ o contratación de empresas externas dedicadas a su gestión para aminorar el impacto y toxicidad y depositarlos o eliminarlos de forma segura.
Al producirse estos desechos y no ser controlados a tiempo, estos son capaces de alterar las propiedades físicas y químicas del suelo, emanar gases contaminantes que luego son respirados por los animales y seres humanos, contaminar el agua por el arrastre de desechos que finalmente se depositan en lagos y océanos, entre otras consecuencias negativas.
La buena noticia es que hoy en día existen múltiples mecanismos, estudios y tratamientos que las empresas pueden poner en práctica para reducir el impacto ambiental que ocasionan. Para esto existen dos alternativas recomendadas: crear y equipar un departamento interno de gestión de residuos con los más altos estándares en tecnología y conocimiento (opción más costosa) o, contratar empresas externas que cuenten con el know how, experiencia, personal y herramientas técnicas especializadas para realizar estos procesos.
Cumpliendo con este objetivo, Hidronor cuenta con más de 25 años de experiencia en el transporte, tratamiento, disposición, revalorización, recuperación y reciclaje de residuos en Chile, y está posicionada como la principal compañía en el país dedicada a tratar residuos peligrosos (RESPEL) de forma externa o In Situ.