Publicada el 16 de marzo del 2017.-

Las actividades humanas y la sobrepoblación, entre otros factores, han contribuido a acumular enormes cantidades de residuos anualmente. por lo que los vertederos y las quemas al aire libre son cada día más comunes, generando daños al medio ambiente y enfermedades.

Los residuos domiciliarios mal gestionados, pueden implicar un riesgo constante para la salud de las personas, además de contaminar los suelos, pudiendo incluso llegar a afectar el agua potable. Debemos asegurarnos que éstos deben ser gestionados en rellenos sanitarios autorizados.

También existen otras alternativas amigables que minimizan el impacto al medio ambiente.

¿Qué debemos hacer para encontrar una solución limpia a este problema?

Avanzar en la dirección correcta implica tomar medidas generales, también conocidas como las tres R:

Reducir

es decir detener el problema antes de que este exista, eliminando el origen de la contaminación.

Reutilizar

volver a utilizar materiales desechados, que pueden ser útiles en actividades distintas para las que fueron originalmente.

Reciclar

utilizar residuos como materia prima para producir nuevos elementos, como por ejemplo el papel, el vidrio y el aluminio.

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Fuente: planetica.org